La
vida de Camilo
Había una vez un lápiz llamado Camilo y solía vivir en los útiles de Verónica, a él le encantaba ir a clases porque conocía más lápices y aprendía. Un día Verónica lo dejo caer en el salón de cálculo y el sólo y con frio se puso a llorar, cuando vio que un niño pequeño que estaba jugando en el aula lo vio y lo recogió. El niño era muy inquieto entonces lo mordía, jugaba y escribía con él. Camilo se volvió a sentir feliz porque alguien lo estaba usando, bien cuando llegaron a casa el niño coloco el lápiz en su cartuchera y todos los útiles lo recibieron muy bien pero había una tajalápiz “Silvia” que estaba solita en un rincón ni lo saludo, él la observo por unos segundos y pregunto a todos por ella, todos le dijeron malos conceptos porque ella los lastimaba cuando cumplía su función, pero por más que le decían él no podía dejar de verla, le parecía un objeto hermoso y raro , Camilo se acercó y cruzo palabras con Silvia pero ella le pedía distancia. Durante unas semanas el siguió buscándola
Katherin Nova
No hay comentarios:
Publicar un comentario